Jardines de Alfabia
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Los Jardines de Alfabia tienen sus raíces en una antigua alquería árabe ubicada en Bunyola, en plena Serra de Tramuntana. Su primer propietario conocido fue Ben Abet, un visir musulmán que, tras la conquista cristiana de Mallorca por Jaume I, pactó con los nuevos señores para conservar la finca. Desde entonces, Alfabia ha sido testigo de siglos de historia, evolucionando sin perder su equilibrio entre tradición y autenticidad.
La casa de Alfabia es un testimonio vivo de la fusión de estilos arquitectónicos: desde elementos almohades de 1170 en su artesonado, hasta detalles barrocos como el imponente portal forà con puertas de bronce y marco de piedra rojiza diseñado por Joan d’Aragó. El interior conserva estancias históricas como la Sala Gran, la Sala de l’Alcova o el comedor del siglo XIX, reflejo de una casa que ha sabido conservar su esencia a lo largo de los siglos.
El jardín de Alfabia es uno de los más singulares de Mallorca, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2011. De origen hispanoárabe, evolucionó con aportes renacentistas, barrocos y paisajismo inglés. La famosa pérgola con surtidores cruzados, el aljibe abovedado y la zona tropical con estanque y nenúfares componen un recorrido sensorial único, enmarcado por la belleza natural de la Tramuntana.
Actualmente propiedad de la familia Zaforteza, Alfabia ha sido cuidadosamente preservada y abierta al público como espacio cultural y para eventos. En 2017 recibió el premio al Jardín Histórico y Singular otorgado por la Fundación de Casas Históricas y Singulares, en reconocimiento a su valor patrimonial y paisajístico.
Más que un jardín, Alfabia es un universo de historia, arte y naturaleza. Sus espacios versátiles —la clastra, la pérgola, el palmeral o el Jardinet de la Reina— lo convierten en un lugar excepcional para bodas, cenas y celebraciones. Aislado del bullicio y rodeado de frescura, Alfabia ofrece una experiencia mágica y auténtica en el corazón de Mallorca.
